jueves, 20 de febrero de 2014

Capitulo 19 Ya Disponible

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Capítulo 19: Bienvenidos A La Playa.

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Capítulo 19
                        Bienvenidos a la playa.


Adam se encontraba en el inframundo, al fin su obscuridad se había ido por completo, ahora sólo necesitaba escapar para encontrarse con Bella y con Maddie.
El hombre pasaba noche y día pensando en cómo escapar, pero tenía la mente en blanco.
CAMBIO DE TRAMA
Rapunzel estaba en el camerino, entonces una chica de cabello corto color negro y ojos azules se acercó.
-         ¿Quieres que te arregle el cabello?
-         Sí, por favor.
-         Siéntate.
Rapunzel se sentó.
-         ¿Te lo corto o te lo peino?
-         Córtalo- dijo Rapunzel con un temor en la voz, sabía que su cabello estaba hechizado- hasta donde termina la espalda.
La chica tomó las tijeras y...
Rapunzel ya se estaba preparando para el color café, pero después del corte siguió siendo igual de dorado que antes, para su sorpresa.
CAMBIO DE TRAMA
Anna observaba horrorizada a Hans.
-         ¿Qué haces aquí?- gritó Kristoff
-         Elsa aceptó en hospedarme. Veo que tuvieron una noche agitada...
-         ¿Para qué quieres que nos quedemos?- preguntó Anna
-         Los necesito para mi plan.
-         ¿Nos harás daño?- preguntó Kristoff
-         No, pero ustedes me ayudaran a hacer daño, claro, si quieren seguir vivos.
Anna y Kristoff fruncieron el ceño.

Elsa estaba en su cuarto, creando una estatua de Anna y Kristoff. Ese sería su regalo de bodas.
Se concentraba mucho a la hora de construir, si se distraía podía terminar en un desastre.
Después de media hora, al fin terminó.
Alguien tocó la puerta.
-         ¿Quién es?
-         Soy yo, Kristoff
-         Pasa
Kristoff entró junto con Anna.
-         ¿Todo bien? ¿Ya empacaron?
-         No iremos a ningún lado- dijo Anna con cierta desilusión
-         ¿Por qué?
-         Hans nos lo impidió- contestó Kristoff enojado- ¿Tu lo dejaste pasar?
-         Tiene poderes, al parecer más fuertes que los míos.
-         ¡Demonios!- gritó Anna
-         Bueno... cambiando de tema, les tengo un regalo.
Elsa abrió las puertas de su balcón.
-         ¡Oh, Elsa! Es hermosa
-         Muchas gracias, me costó trabajo hacerla
-         ¡Santo cielo! ¡Soy yo hecho de hielo! No podría haber mejor regalo. Gracias, Reina Elsa.
-         Llámame solo Elsa.
-         De acuerdo, Elsa.
CAMBIO DE TRAMA
Hippo cayó en el suelo, suspiró. Soltó una lágrima.
¿Cómo había podido ser tan idiota? Creyendo que Mérida lo amaba de verdad, tan sólo lo usaba.
Ella realmente sólo amaba a Jim, tantos “te amo” falsos... No podía ser... Ella realmente parecía amarlo... Al parecer era muy buena fingiendo...
El chico se levantó del suelo, suspiró de nuevo y se dirigió con Jim.
-         ¡Jim! ¿Puedo hablar contigo?
-         ¿Sobre qué? Tengo que alistarme y...
-         Es urgente, por favor.
-         De acuerdo
-         ¿Podría ser en un lugar más privado?
-         Claro.
Ambos fueron al cuarto de Jim.
-         ¿Ya me dices?
-         Quiero que cantes la canción con Mérida.
-         ¿Qué? ¿Por qué?
-         Perdí la batalla, Jim. Ella aún te ama... Y  escribió la canción para ti, no para mí.
-         ¿Quieres en serio eso?
-         Si así es feliz ella... Adelante.
-         ¡Genial! Gracias, Hippo.
Jim bajó rápidamente las escaleras. Decidió que sería sorpresa para Mérida
CAMBIO DE TRAMA
Anna estaba sentada leyendo un libro en su habitación, estaba esperando a Kristoff. Salió por un vaso de agua y se encontró con Hans.
Anna siguió de largo sin saludar a Hans. Entonces chocó con algo, pero no era posible, no había nada delante de ella.
Volteó, Hans tenía una sonrisa malvada en su rostro.
Al parecer Hans había hecho una especie de domo invisible y encerró a Anna ahí.
La chica comenzó a sentir descargas eléctricas por todo el cuerpo, soltó un grito y cayó de rodillas.
-         ¡Kristoff!
Kristoff llegó corriendo al escuchar la angustiada voz de su amada, la cual estaba en el suelo, casi inconsciente. Hans se encontraba a un par de metros.
El hombre de cabello rubio se echó encima del príncipe, le pegó un puñetazo en la cara.
-         ¿Qué le hiciste, maldito?
Entonces, Hans se levantó furioso. Levantó sus manos y un rayo cayó en frente de Kristoff.
Después, Hans le lanzó fuego.
El chico cayó de rodillas al suelo.
CAMBIO DE TRAMA
Walt estaba en el jardín del Hotel Transilvania, lamentando la muerte del hada azul.
Oswald llegó corriendo.
-         ¡Padre! ¡Hace cuanto que no te veo!
-         ¿Qué tal todo, Oswald?
-         ¡Genial! Todo va de maravilla... Ortensia y yo somos el uno para el otro.
-         Me alegro- dijo Walt distante
-         ¿Padre? ¿Todo bien?
-         Nada bien, todas mis creaciones están en problemas, y mi hijo es un completo demente... No, no tú, Mickey es el completo demente. No hay día que no extrañe estar sentado contándoles un cuento.
-         Oh... Padre, a todos nos afecta esto, pero hay que relajarnos un poco ¡Anda, ven a ver el concurso!
-         Bueno, vamos
Ambos se sentaron en primera fila frente al escenario.
-         ¡Y tercera llamada!- gritó Drácula- ¡El espectáculo ha comenzado! Primero, ella es Rapunzel, con su canción Ruleta.
-         ¡Hola!- gritó Rapunzel que acababa de subir
-         Cuéntanos, Rapunzel. ¿En qué te inspiraste para componer “Ruleta”?
-         Bueno... Me inspiré en cuando comencé a sospechar que estaba enamorada de Eugene.
-         ¡Guau! ¡Qué romántico! ¿Y a quién se la dedicas!
-         ¡A Eugene! Además, hoy es nuestro aniversario. ¡Feliz aniversario, Eugene!
-         ¡Que tierno! ¡Que comience la canción!
Drácula bajó y Rapunzel comenzó a cantar.



-         ¡Fabuloso! ¡El siguiente es Wilbur Robinson con “Yo soy así”! ¡Sube Wilbur! ¿En qué te inspiraste?
-         En mi amada novia, Violeta Parr- Wilbur guiñó un ojo mientras Violeta se sonrojaba.
Wilbur cantó muy bien.

-         El siguiente es... Jack Frost, con su canción “Yo quisiera” ¡Vamos!
-         Gracias por la bienvenida
-         ¿En qué te inspiraste?
-         En un amor no correspondido.


Jack subió al escenario muy nervioso, sin quitarle la mirada a Rapunzel mientras cantaba, lo cual hizo a Eugene tener un ataque de celos.

Cantaron muchos otros, cuando por fin, llegó el turno de Mérida.
-         ¡Y ahora, Mérida e Hippo con su canción “Nuestro Camino”!
Mérida subió sola, mientras buscaba a Hippo nerviosamente.
Decidió saltarse las preguntas, no quería decir que se había inspirado en Jim.
Hippo no llegaba y Mérida tuvo que cantar sola, rogando al cielo que Hippo apareciera.
Cuando Hippo debía entrar, una voz conocida que no era la de Hippo llegó a Mérida, se dio la media vuelta viendo a Jim cantando, la chica se sorprendió mucho, pero cantó muy feliz, podía cantarla con su amor verdadero... ¿O era Hippo su verdadero amor?


CAMBIO DE TRAMA
Bella, Edward, Renesmee y un Jacob convertido en oso iban caminando por el bosque con la esperanza de encontrar a la bruja que había hecho el pastel.
La luna ya estaba saliendo, era una hermosa luna llena.
Bella la veía, presintiendo que algo estaba mal, y entonces un ruido se oyó en los árboles.
Los cuatro voltearon con espanto, era el bosque, podía aparecer cualquier cosa, pero en su lugar apareció una hermosa chica de cabello negro y ojos azules con una capa roja.
-         ¿Buscaban algo, vampiros?
-         ¿Cómo es que sabes que somos vampiros, bueno mis padres?- preguntó Renesmee fascinada.
-         Mi olfato me lo dijo.
-         ¿Olfato?- preguntó Edward- ¿Eres un hombre lobo?
-         Prefiero mujer lobo, pero sí. Y al parecer ese oso que traen ahí también lo era. ¿Qué le sucedió?
-         ¡Una bruja me dio un panque y él lo comió!- grito Nessie- ¿Conoces a alguna bruja?
-         Oh, cariño... Conozco muchas... No todas buenas.
-         ¿Podrías presentarnos a alguna?
-         Claro. Soy Red, encantada- la chica extendió la mano.

CAMBIO DE TRAMA
-         ¡Y ahora anunciaremos a los ganadores!- gritó Drácula emocionado.
Todos los concursantes subieron al escenario.
-         Antes, quiero anunciar los premios. Todos los concursantes irán al nuevo “Hotel Transilvania” en la playa y se quedaran ahí unos días. El ganador se hospedará en el cuarto más lujoso de todos. El cuarto Drácula.
Todos aplaudieron, los concursantes estaban muy emocionados.
-         Y en tercer lugar...- comenzó Drácula- ¡Wilbur Robinson, con Yo Soy Así!
-         En segundo lugar- dijo Mavis- ¡Mérida y Jim con Nuestro Camino!
-         Y en primer lugar- gritó Johnny- Quedó... ¡Rapunzel con Ruleta!
Wilbur, Mérida y Jim recibieron medallas, Rapunzel recibió un trofeo, medalla y el cuarto Drácula...

Rapunzel y Flynn hacían las maletas, mañana saldrían directo al “Hotel Transylvania: Relajación en la playa” junto con Hairy, ambos estaban muy emocionados, era un gran regalo de aniversario.
La pequeña Hairy se había ido a dormir con Bella y Maddie para dejarles un poco de privacidad en la velada de su aniversario.
Rapunzel se estaba quitando la ropa para meterse a la ducha.
-         Eugene... ¿No quieres que hagamos algo?
-         ¿Algo? ¿Ya salimos a cenar un rato, no?- contestó Flynn sabiendo lo que Rapunzel insinuaba.
-         Sí, pero... ¿No quieres hacer algo más?
-         ¿Algo más como que?- dijo Flynn con una sonrisa pícara.
-         ¡Eugene! Creo que ya lo sabes.
El hombre soltó una carcajada y abrazó a Rapunzel mientras la ayuda a desvestirse.
Después él se quitó la ropa y ambos se metieron a bañar.
Flynn abrazaba a Rapunzel y esta lo apretaba muy fuerte, tenía miedo. Miedo de volver a perderlo.
Se besaron muy apasionadamente.
Después de unos veinte minutos salieron y se secaron.
Flynn cargó a Rapunzel, pero ella logró bajar y comenzó a correr.
-         ¡Atrápame si puedes, Eugene!
El hombre comenzó a perseguirla por toda la habitación, que obviamente era muy extensa, cuando después de mucho correteo al fin la atrapó.
-         ¿Qué gané?
Rapunzel volvió a besar a Flynn.
Flynn la cargó y se metieron a la cama.

Rapunzel y Flynn estaban exhaustos, había sido una gran noche.
-         Eugene...
-         ¿Sí?
-         Tengo miedo- la rubia abrazó a Flynn
-         ¿Miedo de qué o de quién?
-         De volverte a perder... Lloraba todas las noches... Y cuando Hairy desapareció... No sabes cómo me puse.
-         Te prometo que no nos volveremos a separar nunca.
-         ¿En serio?
-         Por mi vida
La chica abrazó a su esposo, al mismo tiempo que él sonreía. El hombre comenzó a recordar el día de su boda...  Rapunzel se veía tan hermosa... Sus ojos verdes siempre lo dejaban impactados, ¿Y qué decir de su cabello? Fuera café o dorado era lo que más le gustaba de ella.
Su personalidad lo mataba, ese carácter bipolar y entusiasta que mostraba, no importaba si era el fin del mundo siempre estaba intentando arreglar las cosas y haciendo reír a los demás.
Y ella era toda suya, no era ni de Jack, ni de nadie más. Era del él, de Flynn Rider o Eugene Fitzherbert como lo quieran llamar.
También recordó cuando fueron a la coronación de la prima de Rapunzel, Elsa. Como todo había quedado congelado, y ella había sido la más entusiasta. Había organizado concursos de muñecos de nieve, carreras y guerra de nieve para los más pequeños.
Ella era con quien quería pasar toda su vida, ella lo había sacado de esa oscuridad en la que vivía. De esa oscuridad en la que robaba, de esa oscuridad en la que siempre tenía que escapar. De esa oscuridad en la que nadie lo quería, y en la que él no quería a nadie.
Ella le había dado a la otra persona que amaba, a Hairy, a su amada hija.
Cada vez que la veía, estuviera tiste, enojado o deprimido todo su día se alegraba.
Ella era la primera mujer por la que había sentido amor... Era la primera que le provocaba ese hermoso sentimiento, en el cual todo su mundo giraba en torno a ella y a Hairy.
Y haría lo que fuera, lo que fuera, por jamás volverse a separar de ella.
CAMBIO DE TRAMA
Mérida acababa de despertar cuando alguien tocó la puerta, la chica abrió de mala gana. Cuando vio a Hippo sintió mariposas, pero entonces se esfumaron cuando el chico habló.
-         Tenemos que hablar
-         Pasa.  Astrid ya se fue.
-         Bien... ¿Por dónde empiezo?
-         ¿Qué sucede?
-         Jim, eso sucede....
-         Si es por ayer, ¡Fue sorpresa, yo no sabía que el saldría de la nada!
-         Yo le dije que cantara contigo.
-         ¿En serio? ¿Por qué?
-         Porque la canción no era para mí, era para él.
-         ¿Qué?... ¿Cómo?... ¿Cómo es que te enteraste?- Mérida estaba muy sorprendida
-         Te oí hablar con Rapunzel...
-         Hippo...
-         Lamento decirlo, pero esto termino.
-         ¿Qué? Tú sabías que algo me pasaba con Jim...
-         ¡No me molesta que la canción sea para él! ¡Me molesta que me hayas mentido!
-         Pero...
-         Sé que duele tanto recordar- comenzó a cantar Hippo- Que sientes ganas de llorar. Pero no quiero hablar mirándote la espalda. Ya... Nos queda sólo un poco más, la historia está por terminar y no quiero pensar que nos valió de nada. No hubo nadie quien amara tanto, ahora entiendo claramente cuánto. Terminemos con la cara en alto este amor. Por esos días llenos de sueños, por las sonrisas que no volverán, por ese beso que estuvo a punto de matar, seamos cuerdos un momento, por los recuerdos.
-         Pero...- Antes de que Mérida acabará Hippo puso uno de sus dedos sobre sus labios y continuo cantando.
-         Yo sé que al fin la vida seguirá, que alguien más te encontrarás, que lo nuestro será un rastro del pasado. Sólo por última vez finjamos vida que esto aún no ha terminado. No hubo nadie quien amara tanto, ahora entiendo claramente cuanto, terminemos con la cara en alto este amor...

-         Hippo, por favor...
-         Mérida, ya no puedo seguir con esto. ¡Me lastimas! ¡Me haces mal! Y perdón, pero no quiero estar con alguien que me hace sufrir.
Hippo se fue, dejando a Mérida llorando.

Todos estaban ya listos para irse a la playa, incluso Mérida con el corazón hecho trizas.
Después de ahí irían a Arendelle. Jack había formado una tripulación, en la cual estaban: Mérida, Jim, Hippo, Audrey, Ralph, Rapunzel, Vanellope, Flynn, Conejo, Sandman, El Hada De Los Dientes, Wilbur y Violeta.
Walt estaba enterado. Así que había mandado a Tlaw y a Theodora.
Habían pasado un par de horas antes de que llegaran, para cuando bajaron del carruaje ya todos estaban sudando del calor, pero tenían una sonrisa de oreja a oreja.
Primero fueron a enseñarles sus habitaciones, eran un completo lujo.
Después de dejar sus cosas, salieron a comer.

En la playa de el mismo hotel...
Anna y Kristoff se besaban en las olas.
Elsa había conseguido que Hans los dejara ir, pero con la condición de que todos fueran- Elsa, Anna, Kristoff, Olaf y Hans- por desgracia, Sven se quedó porque no le gustaba mucho la arena ni el mar. (Traumas de la infancia del pobre reno).
Elsa estaba sentada en uno de los camastros mientras tomaba una limonada, Olaf se asoleaba y Hans daba un paseo por la playa.

Entonces muchas personas bajaron corriendo, entre las cual Elsa reconoció a...
-         ¿ELSA?- Gritó Rapunzel emocionada mientras jalaba a Mérida- ¡Que sorpresa!
Elsa saltó del camastro emocionada.
-         ¡Prima! ¿No estabas desaparecida?
-         Pues si... Bueno, no exactamente, Me tuve que alejar del reino por cuestiones de seguridad... De hecho íbamos a buscarte después de éste viaje...
-         ¿Buscarme?
-         Sí... Jack tenía una misión sobre buscarte... Bueno, cambiando de tema. Ella es Mérida, mi mejor amiga.
-         Encantada, soy Elsa.
-         Y yo... Mérida- ambas rieron.
Anna llegó corriendo, saludó y se presentó.
Todos comenzaron a presentarse alegremente, Kristoff y Flynn estaban contentos de volverse a ver.
-         ¿Qué tal tu vida?- preguntó Flynn
-         Pues todo bien, ¿Y la tuya?
-         Bastante complicada para ser sinceros.
-         Pues si... Ser rey de corona debe ser complicado- Elsa y Flynn soltaron unas buenas carcajadas.
-         Y dinos Elsa- preguntó Flynn- ¿Cuándo habrá un rey de Arendelle?
-         Nunca- la sonrisa en la boca de Elsa había desaparecido, comenzó a caminar hacia atrás nerviosa. Pero tropezó con alguien y cayó al suelo.
Alguien la levantó, la chica se quedó viendo unos hermosos ojos verdes antes de decir gracias.
-         No hay de que, soy Hippo.
-         Yo soy... Elsa
La chica bajó la mirada pero Hippo se la quedó viendo, Mérida que se dio cuenta de la repentina atracción sintió como si le hubieran pateado el estómago.

-         ¡Mérida! ¿No vienes a nadar?- gritó Anna
-         ¡Ya voy!- la chica fue corriendo con Rapunzel y Anna.
-         ¿Estás bien?- preguntó Rapunzel- Ya sabes...
-         ¿Qué pasó?- preguntó Anna angustiada
-         Acabo de romper con mi novio- dijo Mérida con cara de pocos amigos.
-         Oh... Lo siento mucho- Anna abrazó a su nueva amiga.- Hay alguien mejor. Hay muchos hombres, Yo también he tenido el corazón roto.
Las chicas siguieron hablando, cuando de repente llegó Kristoff por detrás y abrazó a Anna mientras la cargaba.
-         ¡Basta de charlas, princesa, es hora de un momento a solas, que al fin y al cabo es nuestra luna de miel! ¡Hora de un momento Kristanna!
-         ¿Kristanna?- rio Rapunzel
-         Kristoff y Anna. ¡Kristanna!
Mérida rio.
Hairy llegó corriendo con su mamá.
-         ¡Mami! ¿Nos ayudas a papá y a mí a construir un castillo de arena?
-         Claro... Mérida, ¿No te molesta?
-         ¡Por supuesto que no! Estoy bien.
Rapunzel se fue.
Jim llegó con Mérida.
CAMBIO DE TRAMA
El sultán de Ágrabah tocaba muy fuerte la puerta de una vieja cabaña, la cual se abrió por arte de magia.
-         ¿Quién está ahí?- dijo una voz que el sultán reconoció rápidamente.
-         Soy yo... El Sultán de Ágrabah.
Bella (Once Upon a Time) Abrió la puerta con una sonrisa de lado a lado.
-         Pasa.
-         Gracias, Bella.

El sultán entró tembloroso, Rumplestilskin lo esperaba sentado en la mesa.
-         Pasa, querido. ¿Qué es lo que sucede?
-         Mi hija y su esposo... Ellos... desaparecieron.
-         ¿Y en qué puedo ayudarte?
-         Bueno, pensaba que tal vez podrías decirme en dónde están.
-         ¿En dónde están quiénes?
-         ¡Rumpel! ¡No estoy jugando! ¡En dónde están Jasmine y Aladdín!
-         Bien, bien. Pero tú sabes que yo no doy nada gratis...
-         Y estoy completamente consciente de ello. ¿Qué es lo qué quieres?
-         Algo que he querido desde hace mucho tiempo...
-         Dime.
-         Bien. Quiero algo que no es muy caro, pero si es bastante difícil de conseguir.
-         Habla ya.
-         Quiero a tu genio.
CAMBIO DE TRAMA
En el inframundo...
Adam estaba encerrado en una celda, preso y con hambre, cuando por fin el Dr. Facilier y Zafiro entraron.
-         Adam...
-         ¿Qué es lo que quieres, Facilier?
-         Bueno... Resulta que hay algo en tu palacio que es muy valioso para mí. Ya registré tu palacio de pies a cabeza y todavía no lo encuentro, sólo tú sabes dónde está.
-         ¿Y?
-         Quiero que me lo des
-         Con una condición
-         ¿Cuál es tu condición?- preguntó Zafiro desesperada
-         Me vas a quitar la obscuridad, y me dejaras vivir en paz. En mi palacio.
-         Hecho- dijo Facilier.
-         No creeré en ti tan fácil. Quiero que ella haga el juramento inquebrantable, es una hechicera y sabe cómo.
-         Pero...
-         Sin peros, sin juramento, no hay ayuda.
-         De acuerdo.
Zafiro sacó su varita e hizo el juramento, partirían hacia el palacio por el amanecer. Salió rápido de esa celda para reunirse con otros villanos.
CAMBIO DE TRAMA
Jafar, Vanessa,  Gastón, La Reina De Corazones, Maléfica, Scar, Frollo y Chernabog se encontraban en el país de las maravillas.  Entonces un rayo cayó, y en el lugar donde había caído apareció Zafiro.
-         Zafiro ¿Por qué la demora?- preguntó Gastón-
-         El estúpido de Facilier necesitaba de mi ayuda- dijo con un gesto de desprecio.
-         ¿Qué es lo que quieres?- preguntó Vanessa
-         Bien, les tengo una propuesta
-         Habla- dijo Jafar desesperado.
-         Como todos deben saber, Facilier es un inepto, pero no podemos quitarle el mando porque tiene a las sombras de su lado. Y ellas son lo más peligroso que hay. Así que los convoqué aquí para hacer un complot contra él. Lo engañaremos, haremos que nos de todo el poder, y que las sombras estén de nuestro lado. Después lo mataremos y haremos lo que debimos de hacer en un principio: Matar a Walt Disney.
-         ¿Y cómo pretendes engañarlo?- preguntó Maléfica
-         Eso es lo que aún no se, ahí es dónde ustedes deben de ayudarme.
-         Bueno...- dijo Jafar- Facilier está completamente loco por ti, Zafiro. Podemos comenzar con eso.
-         Me parece bien, jugar con el corazón del hombre sombra.
Todos rieron malévolamente. Se tomaron de las manos. Un gran estruendo sonó.
-         ¡Daremos muerte a Facilier!- gritaron todos.

CONTINUARÁ...